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Membrana epirretiniana o crecimiento anormal de tejido sobre la retina

Para una comprensión más precisa de lo que es esta patología ocular, vamos a empezar explicando qué es y qué papel juega la retina en la visión. La retina es la capa más interna del globo ocular. Su papel es fundamental a la hora de tener una buena salud visual, ya que se encarga de transformar la luz que recibimos en un impulso nervioso para que cuando llegue al cerebro éste lo convierta en imágenes.

Por su parte, la membrana epirretiniana es un tejido anormal, casi transparente, que se forma encima de la retina, exactamente en la zona de la mácula. “La mácula es la parte de la retina encargada de la visión central y la que nos permite ver los detalles de las cosas con claridad y nitidez” explica la Dra. Angélica Henríquez, responsable de la Unidad de Retina y Vítreo de Cliniláser.

Este crecimiento anormal o cicatricial se produce cuando células del humor vítreo se colocan sobre la retina dando lugar al crecimiento anómalo de una membrana muy delgada y transparente. “Epirretiniana viene del prefijo “epi” que significa “sobre” y de retina. El principal problema de tener esta membrana es que se adhiera a la retina y provoque una arruga en ella, que al estar en la zona macular, dé como resultado problemas de visión en los pacientes” aclara la oftalmóloga.

Los síntomas de esta enfermedad ocular, que suele presentarse entre los 50 y 70 años, son:

  • Visión borrosa
  • Pérdida de nitidez
  • Las líneas rectas se ven deformadas (metamorfopsia)

“En la mayoría de los casos no existe una razón que explique esta patología, sin embargo, hay que tener en cuenta factores de riesgo como son las inflamaciones intraoculares, ya sean por una retinopatía diabética, una uveítis o desprendimiento de retina” detalla la Dra. Angélica Henríquez.

El diagnóstico de la membrana epirretiniana se realiza con la exploración del fondo del ojo por parte de un oftalmólogo. Y para la confirmación diagnóstica se realiza una Tomografía de Coherencia Óptica (OCT). Esta es una prueba no invasiva que permite tomar imágenes de las capas de la retina, mediante un escaneado de la zona más superficial  la más profunda, detectado cualquier anomalía que ésta presente. “Para realizar esta prueba no se requiere ningún tipo de preparación porque es totalmente indolora. En la mayoría de los casos no requiere siquiera dilatación de la pupila. Tarda unos minutos en realizarse y los resultados se obtienen en el momento” explica la especialista.

En cuanto a los problemas derivados de la membrana epirretiniana, el tratamiento es eminentemente quirúrgico. Para eliminar esta membrana se recurre a la vitrectomía. “Esta microcirugía (se realizan incisiones de menos de 1mm) nos permite acceder a la mácula, zona donde se encuentra esta membrana y, tras identificarla con una tinción, proceder a su extracción. El procedimiento no necesita puntos, aunque sí un reposo relativo” detalla la  responsable de retina y vítreo de Clinilaser.

La vitrectomía se realiza mediante anestesia local. Es recomendable que el paciente venga acompañado porque se le colocará un parche oclusivo en el ojo operado (es retirado al día siguiente). En los días siguientes se pueden notar molestias en el ojo  debidas a la inflamación normal que aparece tras cualquier cirugía. Sin embargo, el postoperatorio solo requiere que el paciente no haga movimientos bruscos con la cabeza, que no haga ejercicio y no cargue con peso.